Una rutina de belleza básica para tu piel

Los especialistas recomiendan una rutina de belleza adaptada a nuestra edad y ritmo de vida. Con unos sencillos pasos podemos lograr que nuestra piel esté hidratada y luminosa. Al mismo tiempo, podremos atenuar y prevenir las arrugas.

Descubre en este artículo cuál es esta rutina de belleza básica que debes conocer. Síguela y verás los resultados en poco tiempo.

El tiempo pasa y el espejo nos delata

El espejo es nuestro aliado aunque las mañanas de algunos días parezca que se empeña en recordarnos el lento transcurrir de los días. El espejo supone la mejor forma de sincerarnos con nosotros mismos.

¿Han aparecido algunas leves arrugas? ¿Nuestras líneas de expresión se tornaron más expresivas? Asumir el paso del tiempo y el trabajo que mantenernos supone es lo mejor que podemos hacer por el cuidado de nuestra piel.

Más allá del maquillaje

Nuestra piel del cutis es importante, ya que es nuestra presentación, nuestro rostro. Es cierto que podemos recurrir a toda una variedad de maquillajes. Y este puede disminuir y quizá disimular pequeñas imperfecciones.

No obstante, el mejor maquillaje merece una piel saludable para que podamos presentar nuestro rostro cual artistas en el mejor de los lienzos. Y debajo debería haber una piel hidratada y nutrida.

Una rutina de belleza

Nuestra rutina de belleza suele ser básica. Pocas personas se toman con seriedad el cuidado de la piel del cutis tan sensible y expuesta a los elementos y al paso del tiempo.

Hoy te sugerimos una rutina de belleza básica que te permitirá mantener una piel tersa y saludable. Además, te ayudará a resistir al daño de los rayos ultravioleta.

Nadie dijo que las líneas de expresión deben avergonzarnos. Después de todo, son la prueba de que hemos reído y hemos llorado. Nada del otro mundo, el vivir nada más.

Pero las líneas de expresión se distorsionan por la falta de humectación y se convierten en un envejecimiento prematuro que ninguna persona quiere afrontar. Así que queremos que conviertas esta rutina de belleza en la más importante. Para que tu piel esté en buenas condiciones y se vea fabulosa.

Rutina de belleza básica

La limpieza

Cuando nos maquillamos nos ocupamos de utilizar las cremas para desmaquillarnos y tenemos como regla no ir a la cama con el maquillaje puesto. Si has hecho eso alguna vez, estás atentando de una manera cruel tu piel.

Siempre debes limpiar la piel antes de ir a dormir, te maquilles o no. Lavar con jabón especial y agua a temperatura ambiente. Esta rutina debemos repetirla a primera hora cuando por la noche nuestra piel se ha regenerado.

La exfoliación

Lavar bien la piel todos los días es básico, pero limpiarla a fondo es indispensable. Podemos exfoliar bien la piel aplicándonos a un poco de yogur natural mezclado con unos granos de azúcar.

Este tipo de productos exfoliantes ayuda a desprender las células muertas y otros tipos de impurezas que no solemos ver a simple vista. Además, evita que los poros se obstruyan o se dilaten.

Asimismo, su aplicación suaviza el rostro y promueve el proceso de regeneración celular. Por lo tanto, incluirlos en la rutina de belleza regular resulta clave para evitar el envejecimiento. 

• Aplicamos este exfoliante con una trozo de algodón para retirar células muertas y residuos acumulados.
• Lavamos con agua y jabón.
• Hacerlo dos veces por semana te librará de acné, puntos negros y granitos.

La hidratación y nutrición

Nunca debes dejar de aplicar humectante en tu piel; al ir a dormir, antes de maquillarte, etc. Eso le provee humedad y evita la resequedad que favorece la aparición de arrugas.

Pero hay que nutrirla siempre. Puedes probar con una mascarilla de papaya una vez por semana además de utilizar una crema nutritiva a diario.

• Si te inclinas por la papaya, corta la papaya madura en pequeñas rodajas y deja sobre la piel media hora antes de acostarte.
• Después, limpiar con agua sin usar jabón.
• Deja que la piel descanse y se alimente.

No obstante, recuerda siempre la importancia de usar protección solar en tu piel. Elige una crema con SPF mínimo del 30 para prevenir el daño solar y envejecimiento prematuro. Y si tienes un problema en la piel recurrente, acude al médico, él podrá realizar un diagnóstico específico y recomendarte el mejor tratamiento para tu caso.
¿Los resultados? Fabulosos. Pero la constancia es la base del éxito. Hazlo parte de tu rutina de vida diaria.