¿Qué es la lengua geográfica?

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Jun 30, 2020   Salud

La lengua geográfica o glositis migratoria benigna es una alteración de la lengua reconocible fácilmente a simple vista. Aparecen manchas y placas en la lengua que pueden cambiar de lugar, recordando a un mapa. No es una patología grave aunque puede causar malestar a aquellos que la sufren.

Anatomía de la lengua

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Aunque no lo parezca, la lengua es un órgano muy complejo. En realidad, la lengua se extiende hasta el límite de la cavidad oral. Está formada por un conjunto de músculos cubiertos por una capa mucosa.

La lengua está formada por tres partes:

  • Raíz: es la parte posterior que forma el suelo de la boca.
  • Cuerpo: es lo que conocemos coloquialmente como lengua.
  • Ápice o punta de la lengua: parte más anterior.

La parte anterior de la lengua es lo que se denomina dorso de la lengua, en comunicación con la cavidad oral y con la faringe. Tiene un surco en forma de V con la punta hacia atrás que se llama surco terminal, que divide la parte anterior (oral) y la posterior (faríngea).

A nivel microscópico, el dorso de la lengua está formado por distintos tipos de papilas:

  • Circunvaladas: las más grandes, localizadas delante del surco terminal.
  • Foliadas: en los laterales de la lengua.
  • Filiformes: muy numerosas y encargadas de la sensibilidad táctil.
  • Fungiformes: más abundantes en los bordes y en el ápice lingual.

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Causas de la lengua geográfica

De momento, no se conoce qué es lo que causa la lengua geográfica, aunque sí se ha relacionado con algunas enfermedades sistémicas, tales como:

  • Asma.
  • Estrés.
  • Ansiedad.
  • Dermatitis atópica, psoriasis y otras patologías cutáneas.
  • Carencias nutricionales, en especial el déficit de vitamina B.

Clínica y patogenia de la lengua geográfica

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Aunque como hemos dicho, no se conoce la causa, lo que ocurre en esta patología es una inflamación lingual que cursa con alteraciones en la superficie de la lengua. Esta inflamación hace que las papilas se aplanen y cambie la estructura normal del dorso lingual.

Suelen aparecer zonas descamadas de forma variable, con el centro eritematoso (enrojecido) y los bordes blanquecinos.

Estas lesiones son superficiales y como la mucosa lingual se regenera con rapidez, cambia su morfología y su localización. Por ello se denomina glositis migratoria.

No suele conllevar una alteración del sentido del gusto ya que las papilas se renuevan con normalidad y las lesiones suelen estar localizadas. Tampoco suelen ser dolorosas, aunque sí puede aumentar la sensibilidad a algunos sabores, como a los alimentos ácidos o la sal.

Estas descamaciones pueden aparecer desde la infancia (a partir de los 6 meses de edad) o en la edad adulta. Las lesiones pueden durar entre meses y años, pudiendo remitir o aparecer nuevos episodios a lo largo del tiempo.

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Anatomía patológica de las lesiones

A nivel microscópico, en las lesiones se puede observar un engrosamiento de la capa superficial, con abundante edema y células inflamatorias como neutrófilos y eosinófilos.

Diagnóstico de la lengua geográfica

Diagnóstico de la lengua geográfica

El diagnóstico de esta entidad suele ser basado en la exploración lingual. Como hemos dicho, la superficie de la lengua tiene una apariencia que recuerda a un mapa. Se observan las zonas descamadas y enrojecidas en ausencia de otros síntomas.

Además, el paciente suele referir que las lesiones cambian de localización y forma a lo largo de los días.

Es una patología benigna que no requiere tratamiento. El objetivo del diagnóstico es descartar otras patologías asociadas, ya que en ocasiones los sujetos se alarman ante la aparición de las lesiones.

Tras las inspección, se puede investigar sobre los hábitos alimentarios del paciente en busca de posibles carencias nutricionales. En estos casos, se puede tomar algún complejo vitamínico para contrarrestar el déficit.

Aun así, en la mayor parte de los casos no tiene repercusión de ningún tipo en la vida del paciente. Además, las lesiones desaparecen solas al cabo de un tiempo y, aunque vuelvan a aparecer, no indica la evolución a ningún tipo de patología más grave.