Jun 30, 2020 Maternidad
Las verduras y vegetales son esenciales en la dieta de los niños porque aportan minerales, vitaminas y antioxidantes importantes para su correcto desarrollo.
Además, como señala esta investigación publicada en Preventive Medicine Reports, dicha variedad de alimentos es clave para mejorar la calidad de su dieta.
El inconveniente es que, a menudo, los pequeños se niegan a comer estos alimentos o muestran rechazo cuando los perciben en sus platos. Por fortuna, existen algunas estrategias para ocultar las verduras en las comidas de los niños y, de este modo, facilitar su consumo.
¿Por qué ocultar las verduras en la dieta infantil?
Como ya se ha mencionado, a menudo, los niños tienden a rechazar las verduras que componen sus platos. Sin embargo, como lo respalda un estudio publicado en Health Psychology Open, hacer más atractivas visualmente las frutas y verduras mejora la disposición de los niños a probarlas y a aumentar su consumo.
Asimismo, esta publicación de Acta Pediátrica determina que a los niños les gustan más los platos que contienen muchos ingredientes y variedad de colores, y, si es posible, que los alimentos del plato formen alguna figura, como una cara sonriente.
Por lo tanto, resulta conveniente poner en práctica algunas estrategias que, de cierto modo, «ocultan» esos vegetales que los menores no quieren comer a priori. De esta forma, podría mejorarse la calidad de su nutrición.
Buenos hábitos
Es importante que el niño empiece a tomar alimentos sólidos alrededor de los cinco meses, y que se vayan variando los vegetales progresivamente. Así, el pequeño se va acostumbrando, poco a poco, a los nuevos sabores, y adquiere, sin darse apenas cuenta, este hábito en su dieta diaria.
En este sentido, es importante ofrecer la misma comida para toda la familia, para que no existan diferencias. Al mismo tiempo, todos los miembros de la familia deben de respetar siempre la hora de la comida. También se puede optar por crear recetas originales y divertidas que les resulten atractivas visualmente.
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Además, puedes hacer que te propongas algunas recetas o que participen ayudándote en la elaboración de ciertas comidas, pues, al manipular los alimentos ellos mismos, se van a ir familiarizando con ellos y se puede despertar un interés por probarlos. Y así lo señala este estudio publicado en Appetite, aunque, por el momento, son necesarias más investigaciones.
Asimismo, hay que optar siempre por una dieta rica en alimentos saludables, en la que los vegetales, las frutas y las verduras estén presentes a diario.
Trucos para ocultar las verduras y vegetales en las comidas
- Ofrece batidos de frutas, que contengan plátano, manzanas o yogur, a la hora del desayuno y de la merienda. Puedes ocultar fácilmente las zanahorias, pues son dulces y no se nota apenas el sabor. Más adelante, puedes mezclar con las frutas rábanos, col o acelgas.
- Si a los niños les gustan las legumbres, puedes añadir, al cocerlas, cebollas, ajos, tomates, zanahorias, patatas y pimientos. Puedes, o bien triturar con la batidora las hortalizas y mezclarlas con las legumbres, o bien todo junto, tanto las legumbres como los vegetales.
- Prepara, simplemente, purés de verduras en los que puedes añadir calabaza, zanahorias, patatas, cebollas o brócoli entre otros.
- La pizza es uno de los alimentos favoritos de los niños, por lo que puedes integrar en ella pequeños trocitos de vegetales. Por ejemplo, cebollas, zanahorias en tiras o calabacín, bien cubiertos de tomate y queso rallado. De esta manera, no notarán el sabor de las verduras, pero ten la siempre la precaución de cortar los vegetales en pequeños trozos.
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- Prepara albóndigas, pastel de carne o hamburguesas. Puedes añadir a la carne picada cebolla, pimientos, zanahorias, puerros y calabacín, todo muy picado. No lo van a notar, porque irá mezclado con la salsa o el tomate, que disimulará el sabor.
- Puedes usar los vegetales para preparar postres y tartas. Por ejemplo, la calabaza, para preparar pastel de cabello de ángel, o hacer una tarta de zanahoria.
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